El Hotel «Casa Sueño» es un hotel de 3 estrellas, rodeado de una gran belleza rural y ubicado en Salas (Asturias). Ha sido diseñado y construido según el estándar Passivhaus, el método constructivo más reconocido, completo y exigente en el mundo de la edificación energética.
Para conseguir cumplir con el estándar, en la fase de diseño, se ha realizado una simulación energética del edificio, analizando su diseño bioclimático, aprovechando la energía y la luz natural durante el invierno y minimizando la incidencia solar durante el verano. Al mismo tiempo, se ha tenido en cuenta la composición de su envolvente térmica, la inercia térmica de sus materiales y la optimización de sus puentes térmicos. A través del análisis de todos estos datos se han elegido las mejores medidas arquitectónicas para nuestro edificio obteniendo elevados niveles de confort interior y un consumo energético muy bajo. En la fase de ejecución, se han cuidado minuciosamente todos los detalles constructivos, obteniendo un valor de 0.36 renovaciones hora en el ensayo Blowerdoor, que permite garantizar el comportamiento del hotel tal y como se diseñó.

El hotel, se ha construido con estructura de entramado ligero de madera material muy aislante, natural, de alta eficiencia energética y muy respetuoso con el medio ambiente. Se ha elegido combinarlo con celulosa insuflada en su interior. La celulosa insuflada es un material aislante compuesto principalmente de fibras de papel reciclado tratadas con sales de boro para hacerlas resistentes al fuego y a los insectos, lo que la convierte en una opción respetuosa con el medio ambiente. Este material se utiliza comúnmente para el aislamiento térmico y acústico en edificaciones.
Desde el punto de vista de la huella de carbono, la celulosa insuflada tiene una ventaja significativa porque utiliza materiales reciclados en su fabricación, lo que reduce la cantidad de recursos naturales necesarios y disminuye las emisiones asociadas a la extracción y procesamiento de materias primas. Además, al ser un material renovable, contribuye a la descarbonización de la industria de la construcción al reducir la dependencia de recursos no renovables.

En el contexto de la construcción circular, la celulosa insuflada también tiene beneficios importantes. Al ser un material ligero y fácil de instalar, puede adaptarse a una amplia variedad de aplicaciones y reutilizarse en futuras renovaciones o demoliciones. Esto promueve la reutilización de materiales y ayuda a reducir la cantidad de residuos de construcción que terminan en vertederos, fomentando así un enfoque más circular y sostenible en la construcción.
Las 10 habitaciones distribuidas en dos plantas tienen ventanas de triple acristalamiento, el edificio consta de un sistema de ventilación con recuperador de calor certificado con el sello Passivhaus y bomba de calor aire-agua para agua caliente sanitaria y calefacción.